La revista Tobacco Control
ha publicado un estudio realizado en Inglaterra que tiene por objetivo evaluar la implantación de la
normativa que prohíbe fumar en ese país desde julio de 2007 en todos los
espacios públicos cerrados sin excepciones. Los autores han estudiado si
la nueva ley inglesa provoca un desplazamiento del consumo de los fumadores
de los espacios públicos a sus hogares. Esto implicaría una mayor exposición
de los menores al humo del tabaco tal y como auguraban los detractores de dicha
normativa.
El estudio ha utilizado la información proveniente de
la Encuesta de Salud de Inglaterra sobre consumo de tabaco en los hogares entre
los años 1998 y 2008. Esta encuesta incluía la determinación objetiva de la exposición
al humo del tabaco mediante un biomarcador (cotinina en saliva).
Los autores no
han encontrado evidencia de un aumento de la exposición infantil al humo del
tabaco tras la implantación de la ley. Por el contrario, si han observado una
disminución progresiva de dicha exposición en los últimos años. Esta
disminución podría ser debida no a la aplicación de la normativa, sino a
la mayor proporción de padres jóvenes no fumadores en los últimos años. También podría deberse al
aumento progresivo en la proporción de hogares cuyos miembros han decidido, a
pesar de ser fumadores, definir sus hogares como libres de humo.
Tanto estos resultados, como los de otro estudio anterior en Escocia, confirman que la prohibición de fumar en todos los espacios cerrados sin excepción no provoca un
desplazamiento del consumo de tabaco a los hogares.